La gemoterapia es una terapia alternativa que ayuda a la sanación a través de la influencia de las gemas o cristales naturales sobre las diferentes dimensiones del hombre.  Desde el reino mineral llega el regalo de los cristales y gemas con toda la magia y su enorme poder puesto al servicio de todos los clientes que busquen una alternativa a sus problemas. La colocación de gemas y  cristales alrededor o sobre  un paciente, puede aumentar y concentrar la energía curativa. Las radiaciones que emiten, aportan al cuerpo la energía que le falta previniendo, e incluso curando la enfermedad. 

 

Durante siglos se les ha atribuido a las piedras propiedades curativas. En los rituales ancestrales, se empleaban los cristales  para curar enfermedades. La gemoterapia es la técnica que se basa en este principio y ayuda a  solventar cualquier desequilibrio que se produzca en el organismo, mediante las radiaciones de determinadas gemas o piedras. Se considera que esta terapia puede sanar a una persona tanto en el plano físico como en el mental y emocional.

Los expertos en sanación con cristales consideran que, cuando  la fuerza que actúa en un cristal está en contacto con el cuerpo o a su alrededor, estimulan, equilibran o reducen el flujo de energía vital que, de acuerdo con el concepto oriental de salud, debe fluir libremente para que nos encontremos bien y estemos sanos.

Forma de actuar

Dibujo que señala los beneficios de las gemas en distintas áreas del cuerpo
Dibujo que señala los beneficios de las gemas en distintas áreas del cuerpo

Las gemas actúan a través de emisión de su energía, la cual reciben directamente del sol. Las gemas toman, contienen, proyectan y reflejan la luz. El objetivo de la utilización de las gemas es que puedas restablecer el flujo de energía de tu cuerpo, favoreciendo el equilibrio físico, mental, emocional y espiritual. Los terapeutas utilizan los cristales de formas muy diversas. Algunos colocan piezas grandes de  amatista o de cuarzo blanco sobre la mesa para limpiar y equilibrar las energías de la habitación. Este trabajo de ajuste suele realizarse con la persona tumbada, total o parcialmente vestida.

El sanador coloca sobre su cuerpo los cristales, dejándose guiar por su intuición. La persona a tratar participa realizando alguna visualización o meditación, según el terapeuta le vaya indicando. Durante la curación el terapeuta debe emplear el poder de su mente para dirigir la energía hacia el área física, mental o emocional en la que se halla el desequilibrio causante de la enfermedad o la tensión.

La terapia con cristales actúa a muchos niveles para favorecer la curación y reducir los problemas físicos y mentales, tales como el estrés, la depresión, la falta de autoestima, el cansancio, los miedos y fobias, refuerza y vitaliza y favorece la cicatrización. No obstante, hay una gran variedad de piedras y gemas con funciones y apariencias muy distintas entre sí.