A pesar de que el Tai chi sea una práctica individual, también es posible realizarlo entre dos personas. Para esta modalidad, es preciso que ambos individuos posean ciertos conocimientos previos sobre esta disciplina y sobre la soltura que han de tener, especialmente para ciertos ejercicios y movimientos, reservando estos ejercicios en común a aquellos que ya llevan un tiempo practicando este deporte. Además, esta disciplina se ha llegado a versionar de tal manera que hasta se han llegado a utilizar mazas y otros artefactos, aunque ello no resulte común y, al igual que sucede con los ejercicios en pareja, esto se reserva a personas con conocimientos avanzados en la técnica para evitar posibles riesgos y accidentes.
El taichí, tai chi o tai chi chuan es un arte marcial practicado por millones de personas en todo el mundo debido a los múltiples beneficios que ofrece, tanto a nivel corporal como mental, a causa de toda la meditación que precisa esta técnica. Estos beneficios se hacen evidentes en poco tiempo, pues aunque se trata de un ejercicio que se realiza lentamente y de forma suave, con él se pueden trabajar todos los músculos del cuerpo, y además se tienen en cuenta otros factores como la fuerza, la flexibilidad y el equilibrio. De este modo, el taichí es efectivo en la mejora de la condición física, en el tratamiento de enfermedades circulatorias e incluso a la hora de retrasar el envejecimiento. Los expertos no recomiendan practicar esta disciplina de manera automática, si tenemos la cabeza y los pensamientos en otro sitio, y es que al tratarse de una composición de ejercicios de cierta complejidad, la mente debe estar totalmente activa y concentrada en los cambios de actividad y de movimiento.
A lo largo del tiempo, se ha ido demostrando que practicar Tai Chi supone conseguir una gran cantidad de beneficios en lo relativo al equilibrio, la fuerza, la flexibilidad y la resistencia muscular. Por otra parte, ayuda a controlar el asma gracias a la manera en la que se realizan las diferentes respiraciones profundas durante los movimientos, e influye a reducir el envejecimiento, gracias a la capacidad aeróbica implícita en todos los ejercicios físicos realizados de forma regular.
Al igual que otros deportes, el Tai Chí puede llegar a influir en la disminución del estrés acumulado, pues gracias a la respiración y a la concentración hace más fácil la acción de relajarse. Por otro lado, mejora la movilidad de diversas articulaciones (Como los hombros, las rodillas o la espalda) protegiendo y fortaleciendo estas zonas si las posturas realizadas durante los ejercicios son las adecuadas. Por último, mencionar también que esta disciplina afecta a la circulación de la sangre y la tensión arterial por medio de los movimientos suaves; A la digestión, pues activa el funcionamiento intestinal; Y también, al sistema nervioso, pues tras la realización de los ejercicios se consigue una tonificación equilibrada del sistema y favorece la capacidad de atención y la calma.
Tipos
Una modalidad del Tai Chí, es el Taichi Yang, en donde predominan los movimientos largos, suaves y en los que no hay una alteración del ritmo de respiraciones o de la fuerza que se ejerce, convirtiéndola en un ejercicio recomendado para los principiantes o para personas de mayor edad.
En el estilo Chen, la otra modalidad del Tai Chí, se pasa de la relajación a la explosión en un solo movimiento, sin que haya una interrupción entre ambas partes, lo que lo hace más complicado. De igual manera, se siguen tratando de ejercicios relativamente moderados, por lo que cualquier persona puede practicarlo si alcanza la disciplina necesaria, por lo que estos no serían los más recomendados para principiantes o para personas de edad avanzada.